26.09.2012
En una conferencia celebrada hace poco en la ciudad de Sochi, donde se discutían temas de la colaboración entre China y Rusia, la ciudad rusa de Blagoveshensk junto a la china de Heihe, figuraban como bases fronterizas gigantes de trafico de drogas entre los dos países.
Estas ciudades están ubicadas en orillas opuestas del río Amur, que divide a Rusia de China. Cada día la frontera entre estas es cruzada por cerca de un millón de personas. Es de entender, que la región se adapta perfectamente a las ambiciones de cultivo y producción de droga de los criminales.
Vale destacar, que los suministros tienen la dirección primordial de China a Rusia. El año pasado fueron revelados algunos intentos de trasiego de narcóticos hacia China, pero como se aclaró después, esas fueron dosis prescriptas para uso individual. A su vez, fueron interceptados 12 intentos de traspaso de grandes lotes de narcóticos desde China.
“Constantemente mantenemos la lucha contra el trafico en esta dirección, y actuamos en colaboración con los órganos policiales de Rusia”, - destacó el viceministro de Seguridad Pública de la RP China, Chan Sinfen.