Caso real sobre el tiempo perdido
Es increíble cómo puede cambiar la vida en un segundo, como puede recurrir a una dirección completamente diferente... Me duele decir esto, pero lo intentaré. Aunque, ahora lo peor ha quedado atrás, todo parece un disparate insoportable...
El nombre de mi novia era Alicia. Eramos inseparables, si ibamos a algún lugar, era juntos, si haciamos un trabajo de control escolar, sólo juntos, si haciamos maldades, tambien unidos. Nos encantaba caminar, divertirnos y, por supuesto, bailar. Bailar hasta el cansancio, hasta las primeras horas de la mañana, hasta que se agotaban las fuerzas. En realidad, con el baile empezó todo.
Si bien es cierto – se acabó todo... Una vez se sentó a nuestra mesa un chico simpático de nombre Slava. Él era extremadamente cortés y de inmediato nos gustó tanto. Alicia, al notar mi interés, dejó de coquetear, y me dió la oportunidad conocer a Slava más de cerca. Todo era maravilloso: nos reíamos, bebíamos, bailábamos...De pronto, dijo Slava que todo estaba un poco aburrido. Me puse tensa: "Estaba aburrido de mí? Esto significa que no volvería? "Pero no era eso lo que Slava pensaba. Sonrió y me llevó junto al baño, donde cerró la puerta y sacó una bolsa de polvo blanco, diciéndome: "¿No quieres probar? Vamos a volar en el verdadero sentido de la palabra" Yo no era tonta y me dí cuenta que se proponía darme a probar la cocaína. Pero en ese momento yo no quería pensar que esta droga podría hacerme dependiente, de que podría perder todo lo que tenía. Quería gustarle a Slava.
Y allá fuimos... La primera sensación fue realmente "volar" Yo me reí, bailé, estaba contento con todo en extremo. Como si yo fuera el conejo en la batería "Duracell"... Pero, ¿quién podía saber que iba a ser tan insaciable? .. ¿Quién podría creer que era mucho más difícil detenerme que comenzar? ¿Por qué nadie me advirtió a tiempo que oler la cocaína no sería suficiente?
Mi pobre amiga... Mientras lloraba, cómo me pedía, me suplicaba que dejara eso, no cesaba de maldecir a Slava y la noche nefasta en el club... pero yo no la escuchaba. Todo lo que necesitaba era una dosis. Yo lo viví. Todo el dinero, y, finalmente, todas lo de valor fue gastado. Empecé a robar a mis padres. Mi pobre mamá... mamá... ¿Cuánto has sufrido, luchando por mí, tratado de volverme a mis sentidos...pero fue en vano. Yo estaba en la euforia, con ojos de vidrio, y no quería escuchar.
Cinco largos años... he perdido todo: mi antigua belleza, mis sueños, mis padres, cansados de luchar se apartaron de mí. He perdido, incluso a Alicia... Y pensar que fuimos inseparables. Ya son cinco años que no sé nada de mi amiga.
Un día, caminando por la calle en busca de un nuevo empleo - entonces yo estaba completamente perdida, buscaba al menos algo de dinero y pensé en el prostituirme, ¡sólo para obtener una dosis! - Me encontré con una pareja feliz y su hijo. Iban un hombre y su mujer. Llevaban de las manos a su bebé y felizmente se reían de su andar irregular.
Un momento después reconocí en aquella mujer a Alicia...mi alma se llenó de frío. Me olvidé de todo.
Yo no era nada ya. Solo el vacío. He perdido la oportunidad de amar y ser amada. Me he despojado de la oportunidad de ser madre... recibir una educación, trabajo, carrera profesional. He perdido incluso a mi amiga más fiel.
Alicia de repente también me vio... y me reconoció... me vio en esa sarnosa, demacrada y amarillenta semejanza de persona. Corrió hacia mí y me abrazó. Lloramos. ¿Qué he hecho? ¿¡Qué he hecho!?.
"No llores, no llores - trató de aplacarme - Yo te ayudaré. Podremos arreglarlo, ¿me oyes? ¡Dejarás la droga. La dejarás!, ¿me oyes? "
"¿Cómo? ¿Cómo puedo dejar las drogas? "
"Yo te ayudaré. De seguro te ayudaré".
Su bebé se sorprendió al verme. No podía entender quién yo era, y por qué su madre estaba llorando ... Pero luego, mirándolo a los ojos muy abiertos, me di cuenta de que quiero-quiero-quiero dejar las drogas, tan solo que no me abandone mi amiga. Y lo lograré...
Comentarios:
No hay comentarios